Hay bodas que lo tienen todo: amor del bueno, energía increíble, detalles de ensueño y una vibra que te envuelve desde el primer minuto. Así fue la boda de Tamara y Gloria, dos mujeres espectaculares, empresarias de Conil de la Frontera y auténticas cracks. Fue una de esas celebraciones que se sienten, que se viven con intensidad y que no se olvidan jamás.
Desde el primer momento, supe que esta boda iba a ser muy especial. Ellas, su gente, su historia… todo rebosaba amor, alegría y emoción. La conexión entre Tamara y Gloria es de esas que te erizan la piel: real, fuerte, luminosa.
Ambas se prepararon en habitaciones separadas del precioso Hotel DAIA Slow Beach, con vistas al mar de Conil. La magia en maquillaje y peluquería vino de la mano de Carla Ortiz y Patricia García, que supieron resaltar aún más la belleza natural y la esencia de cada una.
Tamara lució un diseño espectacular de Pronovias mientras que Gloria apostó por un imponente smoking blanco y negro de Bottura , cambiando más tarde a un segundo traje negro para la fiesta. Elegancia, personalidad y estilo a raudales.
Para Tamara y Gloria, los detalles eran clave. Desde los looks hasta los coches que eligieron para llegar a la ceremonia: Gloria apareció en un Bentley y Tamara en un Lamborghini. Porque sí, esta boda fue lujo, carácter y mucha clase.
Pero si algo fue importante para ellas, además del diseño y la estética, fue la presencia de sus familiares y amigos, que no se separaron de su lado ni un segundo. Amor en estado puro.
La ceremonia, la cena y la fiesta se celebraron en un enclave mágico: Bodegas Luis Pérez, con una organización impecable gracias al trabajo de Bea y Ainhoa de Bianca Weddings, que cuidaron cada detalle como si fuera suyo.
Las flores, obra de los inconfundibles Flor Enea, llenaron de color y sensibilidad cada rincón. El catering, una experiencia en sí misma, estuvo a cargo del maestro Pepe y su equipo de Canela y Clavo, con un corner impresionante de El Jamón del Mar de Almadraba y el toque marino único de Aponiente, de Ángel León.
En el vídeo tuve la suerte de trabajar mano a mano con Juan José de Gearmedia, con quien hicimos equipo para inmortalizar todo lo vivido.
La ceremonia fue intensa, emotiva, llena de palabras al cielo y canciones dedicadas desde lo más profundo del alma. Las miradas, las lágrimas, las risas… todo era auténtico. Todo era ellas.
Después, vino el desmadre bonito: torre de champán, tarta de Aquarela Cakes, tatuadora en directo, DJ, y hasta un concierto brutal de El Maki, con el que cantaron a pleno pulmón Tamara, Gloria y todos sus invitados.
Les entregué un resumen 48 horas después de la boda, con una mezcla de fotografía digital y analógica, porque así se cuentan las historias que merecen ser recordadas con alma.
Si estás preparando una boda inolvidable en Cádiz, Conil, Jerez, Sevilla, Marbella, Córdoba, El Puerto de Santa María o cualquier rincón especial de España, y buscas un enfoque natural, artístico y emotivo, me encantaría contar tu historia.
Puedes escribirme para hablar por videollamada desde donde estés. Nos conocemos, conectamos y lo hacemos realidad.
Nos vemos donde esté el amor 💛
Ana
